...

4 views

Relojero
Mini Relato

Confieso: me he comido esas galletas con la precisión de un relojero suizo. Retiré la cinta adhesiva al tarro, como había diferentes formas me comí algunas al azar, pero se veían demasiados espacios; por lo que decidí emparejar para que todas quedaran al mismo nivel, con sumo cuidado volví a colocar el tarro debidamente sellado en el cajón donde mi padre lo guardaba para la novena.

Era el primer día de la novena mi padre desprende la cinta adhesiva, abre la caja metálica con motivos navideños, mira de reojo y dirige una mirada a mi madre y se hablan con los ojos y con una sonrisa irónica simplemente nos dice “muchachos cada vez traen menos galletas, creo que hoy solo alcanza para la visita, tal vez para nochebuena, si no pasa nada raro, todos comeremos.”

Me siento inmensamente culpable por mi hermano que fue inocentemente afectado y juro solemnemente no volverlo a hacer. Llega la nochebuena nuevamente se abre el empaque y sorpresa falta la primera galleta de cada uno de los compartimientos, mi hermano se acerca y me susurra al oído “yo también soy relojero.”

Fin
© All Rights Reserved