El olvido que no seremos
Cuarenta y cinco meses terrenales sin tu presencia física, solo estoy seguro de que nunca los abandonaste, en especial a tu familia así lo siente mi corazón.
Es difícil ver que el mundo sigue girando como si nada hubiera pasado, si tienes suerte un puñado de familia y amigos te recordarán al principio y no bastarán varias manos para contenerlos y con el paso del tiempo serán suficientes dos manos y tal vez en otros 10 años cinco dedos sean suficientes,
Hago un retroceso de 10 y 15 años y hasta más y vienen a mi mente nombres que alimentaron mi vida en su momento sobre los cuales nos afectó su partida, pero que hoy día solo salen a relucir en esporádicas oportunidades.
La vida sigue girando y sin darnos cuenta nos va robando los recuerdos y los diluye en los torbellinos del tiempo y no los evocamos como seguramente se lo merecen.
Y no importa si eran primera línea de la familia o familiares no frecuentados, o amigos de la vida o simplemente compañeros de guion.
Es muy probable que cuando tengamos qué partir en ese instante nazcan en los corazones flashes de luces diciendo las bondades y lo bueno que eras y hasta te enteres de cualidades ocultas.
Hoy llamo a hacer una reflexión para que no los olvidemos, ellos fueron testigos de tu vida y te aportaron en tu crecimiento material y espiritual .
Hoy recordando a Dios por todos aquellos que ya partieron y que participaron en la vida de quien escribe estas letras y en las de los lectores que se tomen el trabajo de leerlas
Su amigo RiBerpa
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