Padre celestial, líbranos de todo mal,
que el perdido encuentre calma entre tus brazos de bondad,
que aquel perdido entre vicios encuentre extasis en ti,
y que aquella cortesana deje su vida inservil.

Que los niños sin hogar no pasen hambruna y demás,
que la salud encuentre al enfermo que no puede andar,
que lluevan las bendiciones en el mundo terrenal,
y reciban con el corazón abierto tu bondad.

Que conozcan tu palabra entre su cotidianidad ,
te suplico por aquellos en estado terminal,
dales fuerzas y vitalidad para tu nombre honrar,
y fortuna en demasía junto con salud verbal.

Dale amor al corazón que por odio yace perdido,
y más fuerzas al corazón débil que pierde el sentido,
muéstrales esa verdad que por obnubilación pierden,
y enséñales ese amor tan gigantesco que tú tienes.

Ilumina toda oscuridad en corazón ajeno,
y has de todo lo mundano un sentimiento de unidad,
ábrele los ojos ciegos al que no quiere entender,
y has de todo entendimiento un aprendizaje al saber
que eres tú el gran salvador, nuestro gran amo y señor,
que eres muerte terrenal y vida eterna entre los cielos.

Enséñales que vida solo hay una en perdición,
y una vida nueva eterna al aceptarte mi señor,
que los vicios son places mundanos sin salvación,
y que contigo lo pleno es sólo el comienzo de amor.

Padre celestial, salva a las almas perdidas,
te suplico una vez más por aquellas vidas sin vida,
que encuentren en ti el refugio que este mundo no les da,
y que sientan el amor que por odio sienten no hallar.


© •K A O S•