...

7 views

La maldad de tus ojos
Estoy pagando ese presagio de los poemas que escribí,
la condena yo mismo me la puse al estar aquí,
escribiendo obras maestras en un pasado inservil,
ahora me ejecuto a diario y si me muero no es por ti.

Es el karma el que reclama parte de mi sangre fría,
quizás dañé a quién quería tiempo atrás y hoy ya no eres mía,
o serán esos escritos tan densos que me desvían
al corredor de la suerte que se marchita hoy en día.

Inclusive está nublado, el cielo sabe de penas
y solamente tengo en cuenta que de a poco todo acaba,
que los problemas escalan desde la noche hasta el alba,
y que de apoco se pierde ese amor que tanto jurabas.

Hoy solo reina la belleza de su ausencia y si que quema echar de menos lo pasado sabiendo que nada llega,
que los segundos son horas y demoran demasiado y que las horas ahora ahogan sin tener tu piel al lado.

Creo que ya no tengo suerte, lo aposté todo al dejarte,
y ahora que me siento solo sueño volver a tocarte,
redimirme entre tus dedos pero creo es un poco tarde,
no recuerdo ni el consuelo ni tu voz y eso me parte.

Desconozco tú persona, ya no eres la misma de antes
ahora guardo tu recuerdo en un pasado que hoy día arde,
desconozco tus lunares y qué mal que todo acabe de esta manera funesta partiéndonos en mitades.

Esto no es un hasta pronto pues sé que no nos veremos
pero tampoco me arrepiento del tiempo que pasamos
yo me quedo en el letargo, tú ve conociendo brazos
que te den aquel calor que no se compara con nada.

¿La estocada?, claro que duele, pero me acostumbraré a estar solo como desde siempre,
como desde antes que llegaras, como cuando no eras mía,
como cuando aún desconocía 𝓁𝒶 𝓂𝒶𝓁𝒹𝒶𝒹 𝒹𝑒 𝓉𝓊𝓈 𝑜𝒿𝑜𝓈.


© •K A O S•