Anoche tuve un sueño,
estaba perdido dentro en el,
aferrándome a mi intuición,
pero escuché tu voz y encontré una luz.

Se que habrán días,
que habrán noches,
dónde las estrellas no se alineen,
y que tarde en dejar de caer la lluvia.

Así que acuéstate en mi pecho,
deja que el tiempo pase,
y si sentis que te caes,
mi corazón te sostendrá.

Es que esta vida creemos que es larga cuando somos jóvenes,
pero no es tan larga como creemos,
así que trae tu amor,
yo te entregare el mío.

No importa lo que pase,
porque de lo único que estoy seguro es que somos eternos,
no importa lo que pase,
porque nada puede separarnos.

Sos todo lo que pienso,
todo lo que quiero,
y todo lo que tengo para decirte,
es todo lo que me haces sentir.

Aunque el silencio te quite todas las palabras,
voy a estar mirándote a los ojos,
porque a veces tus ojos dicen más,
a veces dicen lo que no podés decir.

Cuando los truenos empiecen a caer y te asustes,
cuando el pasado te atormente,
agarraré tu mano más fuerte,
te abrazaré como nunca,
y te haré recordar que sos todo lo que siempre quise.

Así que acuéstate conmigo está noche,
y deja que el tiempo pase,
no tengas miedo,
porque vamos a hacerlo bien,
vamos a sostenernos mientras sanamos solos nuestras heridas.

Mirándote a los ojos se que desnudo tu corazón,
se que veo lo que no todos ven,
se todo lo que te guardas,
así que no dejes de mirarme ni un segundo más.

No importa lo que pase mi amor,
lo único de lo que estoy seguro,
es que me tenés y yo también te tengo,
y lo demás no importa,
porque estando en nuestro hogar sabemos que somos más felices.