Hoy no deseo hablarte de mis sombras, contarte mis penurias o los motivos de mis desvelos.
Hoy quiero ser refugio.
Construir cobijo con palabras y que cada trazo te conforte.
Que el vocablo sea leña o manta para tu abrigo.
Que halles hogar entre líricas e historias.
Contemplar juntos el crepúsculo en la cima de las íes, y entre puntos suspensivos tengas cómodo descanso...
No con la intención de distraerte de lo esencial o alienarte de la realidad, sino para apaciguar esa tempestad interior que batallas en silencio.
Que golpea en penumbras.

Cabaña acogedora de perpetua bienvenida.
Tu espacio libre de cargas, o para que las sueltes y compartas.
Ofrecer compasiva protección y confianza; ser bálsamo y caricia.

No te preocupes, tenemos café de sobra.

Y si aún hace falta algo para que te sientas como en casa, al compás de la imaginación, con la creatividad al volante y el lenguaje de guía, seguro lo inventamos. ♡


© Dafne A.L